En todo ser vivo la finalidad de sus actos reales retornan a lo real (a la coherencia probada o a la razón), también sus respuestas o expresiones retornan a la coherencia de lo que es real; pero en muchos seres humanos (por el efecto de su obedecer a lo que no es natural ni real ni lógico ni decente) la finalidad nunca es retornar a su procedencia o al sentido equilibrado, sino se separan con apología del error (se creen privilegiados, "oyen voces de arriba", se inventan o viven caprichos, leyendas y alucinan mentalmente en pro de la mentira-sinrazón).
Si dejas pasar una mentira, ya es posible que dejes pasar muchas. Y, para que no dejes pasar una mentira, solo puedes atender en conciencia a quien demuestra racionalmente las mentiras. José Repiso Moyano
domingo, 5 de abril de 2015

Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario