miércoles, 4 de mayo de 2016

La verdadera e irrebatible crueldad es atender antes a un mediático que a tu madre, a uno que enturbia (confunde el camino ético)  que al que demuestra luz-razón sin la ayuda de algún poder (ya sea corporativista, de influencias, del amparo de una línea dominante, político, mediático, etc.) para ello.

No hay comentarios:

Publicar un comentario