No hay inocentes, solo distintos grados de irresponsabilidad
por responsabilidades incumplidas o justificadas a inhumana irresponsabilidad o ninguneada con un no saber valorar ética (porque no hay esfuerzo ni atención realizada a honestidad o a dignidad propia) ni protegerla al esquivarse toda razón.
Si dejas pasar una mentira, ya es posible que dejes pasar muchas. Y, para que no dejes pasar una mentira, solo puedes atender en conciencia a quien demuestra racionalmente las mentiras. José Repiso Moyano
domingo, 4 de octubre de 2015

Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario